LES EAUX DE CHANEL, es una colección inspirada en los lugares favoritos de Coco Chanel, y compuesta en torno a la frescura.
Hasta el momento, esta singular colección está compuesta por 6 lujosas fragancias, y Paris - Édimbourg es una de las más recientes, todas creadas por el perfumista Olivier Polge, en cooperación con el Laboratorio de Creación y Desarrollo de Fragancias de Chanel.
Les Eaux de Chanel son aguas frescas, ligeras, refrescantes y unisex, todas diferentes, tanto por el equilibrio de sus cítricos, como por la elección de unos ingredientes en particular, que son representativos en esas ciudades.
Coco Chanel descubrió Escocia a través del segundo Duque de Westmister, con quien mantuvo una relación durante 6 años, y quedó maravillada de sus paisajes. En esos años, cuando quería alejarse de la estresante vida en Paris, buscaba refugio en las tranquilas tierras de Escocia, en cualquiera de las tres propiedades que el Duque tenía. ( una mansión victoriana en Lochmore, la finca Rosehall Fair al este de Sutherland y Stack Lodge una casa de campo ).
Escocia también sirvió a Coco como fuente de inspiración, reinterpretando la ropa que llevaba la aristocracia británica durante sus actividades de ocio al aire libre, suéteres, tartanes, boinas de lana, y las famosas chaquetas tweed escocesas, creaciones que se convirtieron en emblema del estilo Chanel.
Traje Tweed, bolso y tocado de Chanel portado por la Reina Consorte de los Países Bajos, Máxima Zorreguieta |
Oliver Polge, el perfumista, también quedó impresionado por la grandiosa y misteriosa campiña escocesa, y descubrió dos olores característicos de estas tierras, la baya de enebro y la madera de turba, que estimularon la idea de un eau de toilette con el poder de las plantas aromáticas, tan propias de de las colonias masculinas británicas.
Paris-Édimbourg siendo una fragancia fresca, despliega a la vez acuerdos cálidos y calmantes. Es como el aroma que queda impregnado después de un paseo por el campo.
Es una maravillosa fragancia para el verano, herbal, cítrica, aromática y amaderada, un aroma brillante, adictivo, sencillo y perfectamente equilibrado, un viaje sensorial donde pueden percibirse claramente la mayoría de sus notas.
La apertura de Paris-Édimburg es como un amanecer brumoso en un bosque escocés, cuando pueden percibirse todos los matices olfativos que desprende, aquí representado con notas de ciprés y unas bayas de enebro sutilmente picantes.
La combinación de estas notas altas con las de corazón, compuestas por madera de cedro, un precioso vetiver con sus matices terrosos, verdes y refrescantes, y una aromática y relajante lavanda, potencia la sensación de estar respirando aire puro en un maravilloso prado, en esta fase emerge un efecto balsámico, el toque de madera de turba.
La magia de esta fragancia concluye en un fondo con el característico almizcle de Chanel y una vainilla suave de excelente calidad. Un secado con vibraciones relajantes.
Es una excelente opción de Chanel, para la gente que le gusta usar fragancias frescas y suaves, y a la vez portar un aroma cautivador que irradia elegancia y lujo, y en esta ocasión una esencia que evoca la espectacular campiña de Escocia, cubierta de hierba y el aire fresco de la montaña.
A pesar de ser un Eau de Toilette tiene muy buena duración ( unas 7 horas ), y una proyección moderada.
Como uso casual y de oficina es espectacular. Se inclina un poco más hacia el lado de las fragancias masculinas, pero no dejes desaprovechar la oportunidad de probarlo si eres mujer, y si te gusta, disfrútala, al fin y al cabo precisamente este eau de toilette es el más andrógino de la colección.
Es perfecta para usar tanto en verano como en invierno.
Notas;
Ciprés y Bayas de Enebro.
Madera de Cedro, Vetiver y Lavanda.
Vainilla y Almizcle.
Comentarios
Publicar un comentario