Buenos Aires, la vibrante capital de Argentina, es una ciudad que embriaga los sentidos desde el primer momento. Sus calles están llenas de vida, con una mezcla única de colores y sonidos que reflejan su rica historia y cultura diversa. Desde los elegantes barrios de Recoleta y Palermo, con sus majestuosos edificios y amplios parques, hasta las bulliciosas calles de San Telmo y La Boca, donde el tango y el arte callejero se funden en una sinfonía visual y olfativa, Buenos Aires es una ciudad que no deja indiferente a nadie.
Al caminar por sus avenidas, uno puede percibir el aroma del café recién hecho que se mezcla con el olor de las flores de sus jardines, el suave perfume de los arboles y el característico aroma de las parrillas que invitan a disfrutar de un asado argentino, con su gente cálida y acogedora, cuyo espíritu apasionado y alegre se refleja en cada rincón.
La arquitectura porteña es un reflejo de su rica herencia cultural, con una mezcla de estilos europeos y modernos que crean un paisaje urbano único. Los colores de las fachadas de La Boca, el esplendor de los edificios neoclásicos en el centro y los modernos rascacielos en Puerto Madero conforman una paleta visual tan diversa como la propia ciudad.
Es en este contexto donde nace VERANO PORTEÑO, una fragancia de la primera casa de perfumes nicho argentina fundada por una mujer, Natalia Outeda.
Natalia, nacida en Buenos Aires, pasó unos años en Nueva York desarrollando fragancias para importantes marcas de todo el mundo, hasta que en 2013 decide regresar a su ciudad natal y fundar su propia marca de perfumes, FRASSAÏ.
Cada una de sus fragancias es una invitación a embarcarse en un viaje olfativo a través de Sudamérica y otras partes del mundo, a despertar los sentidos y crear armonía a través de los perfumes.
FRASSAÏ aboga por un cambio cultural hacia una desaceleración del ritmo de vida, y apuesta por una vuelta a la creatividad, el savoir-faire y la calidad por encima de las tendencias y la cantidad.
Sus fragancias contienen una esencia curativa que va más allá del nivel materializado. Son experiencias que hay que saborearlas lentamente, son SLOW PERFUME, la vida lenta es una mentalidad que enfatiza la calidad de vida, una experiencia de vida más placentera y mejores fragancias.
Se llaman “ Perfumes Lentos “ porque se toman el tiempo necesario para crear cada fragancia de su colección, que puede ser uno o dos años, dejando que sus aceites maceren durante semanas o meses, permitiendo así el correcto equilibrio de las notas. Lo importante es respetar el proceso creativo y crear experiencias perfumadas significativas.
VERANO PORTEÑO de FRASSAÏ es una oda al amor, que se inspira en el embriagador aroma a jazmín que inunda las calles de Buenos Aires en verano, evocando la esencia de una ciudad vibrante y apasionada.
Verano Porteño, ha sido creado en colaboración con el perfumista Rodrigo Flores-Roux, que ha combinado cítricos chispeantes y hojas verdes, con flores frescas, vetiver, cedro, y por supuesto yerba mate, capturando de esta forma la esencia de la capital Argentina.
El perfume abre con notas frescas y chispeantes de bergamota de Calabria, Limón y clementina, un olor que nos recuerda los mercados de frutas frescas de la ciudad y el sol radiante. La malva almizclera hace que esta salida adquiera en unos minutos un aroma jabonoso, acentuando los matices cítricos afrutados que se mantienen hasta el final.
A medida que evoluciona, emergen notas de jazmín, magnolia, ylang ylang y alhelí, un ramo floral que aporta frescor, dulzura y la calidez animálica y afrodisíaca del embriagador jazmín, estas flores se envuelven en una sutil nota especiada de cardamomo.
Este viaje sensorial concluye con una base de vetiver terroso, el toque amaderado del cedro siciliano y los matices herbales, verdes y ahumados de la yerba mate, una nota que simboliza profundamente la cultura argentina, reflejando la hospitalidad y camaradería de los porteños.
Verano Porteño es una fragancia que aunque se inclina más del lado femenino, también se adapta sorprendentemente bien a la piel masculina aportando frescura y un toque distintivo, sin ser abrumador.
Tiene una duración extraordinaria para ser un perfume floral fresco.
Acuerdos cítricos, jazmín y maderas con matices terrosos y herbales son los protagonistas de esta creación de Frassaï
Verano Porteño es elegante, vibrante, evocador, suave, lujoso, alegre, luminoso, un perfume que nos transmite serenidad y paz.
Notas;
Bergamota de Calabria, Clementina, Limón, Cardamomo, Cedro de Sicilia, Jazmín Imperial, Magnolia Grandiflora, Semillas de Ambrette, Vetiver, Alhelí, Yerba Mate, Pachuli, Ylang Ylang.
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